#ElPerúQueQueremos

Isbel Bordanoba Beltrán

No quedará en la noche una estrella

Haré polvo el polvo.

Publicado: 2013-09-01

Olvidar es imposible. Partamos de esa quizá verdad absoluta. Muchos dicen, con muy buena voluntad, que el tiempo es la mejor cura para las profundas heridas del pasado. Pero más bien el tiempo, al alejar los recuerdos en pasmosos momentos incrustados en la memoria, convierte al pasado en un turbio universo que se instala en diversos espacios del espíritu, matándonos. 


***

Sábado. 3:30 p.m.

No he querido despertarme. No he querido enfrentarme al espejo. He querido quedarme debajo de las sábanas, no abrir la ventanas y no sentir el frío en la cara de la llovizna limeña. He escuchado algunas voces, pasos y la cabeza me da tantas vueltas que ni me percato dónde estoy. Nunca había estado en esa realidad. Estoy mal, estoy cansado. He querido dormir y no he podido.


***

Viernes. 7:15 p.m.

Decido salir de fiesta. No importa dónde ni cómo ni nada. Tienes dinero. No te importa nada. Te duchas, te afeitas, te cambias. Te tomas dos cervezas escuchando Dr. Dog. Piensas que está todo bien, que eres feliz por estar soltero, de ser totalmente libre, de tener las riendas de tu vida. ¿Por qué el amor es incompatible a la libertad? Eres preso de recuerdos que no te dejan vivir en paz. La sigues queriendo, la extrañas. ¿Cómo va a estar lejos de ti? ¿Por qué está lejos de ti?

Por todo lo que eres.

Rosseau con Las Artes. Ron, vodka y malrboros. Beastie Boys. Un patio que parece un bosque. 60 personas.  


***

Sábado. 4:35 a.m.

Hay momentos en la fiesta -cuando se acumula el alcohol en tu cerebro- en los que debes tomar decisiones. ¿Te vas a ir en algún momento? ¿Solo o acompañado? ¿Le hablo? ¿Qué le digo? ¿La llamo? ¿De dónde salen todas esas interrogantes que te arden?

Las preguntas retumban en un cerebro asediado por el ron y los universos terminan por mezclarse formando una -a veces no tan feliz-ficción.

¿Hasta qué punto quieres entrar en la ficción? ¿Que tan valiente eres para hacerlo? 

Comes la mitad de un trip.

No quedará en la noche una estrella.



Escrito por

Jonathan Diez

Periodista


Publicado en